martes, 26 de octubre de 2010

La extinción de los Walkman


Fueron la revolución musical de su época, casi equiparable a la que provocó la introducción de los modernos mp3s. Gran sorpresa me llevé al enterarme que aún se seguían fabricando... hasta ahora.

Transcribo la necrológica de esta pieza tecnológica que tantas alegrías supo aportarle a la humanidad y que termina sucumbiendo ante los omnipresentes ceros y unos.


Las cintas de componentes químicos similares al plástico para almacenar música grabada para ser escuchada en un magnetófono ya no se fabricarán más.

O lo que es lo mismo, los míticos casetes portátiles o "walkmans" si tenemos en cuenta la marca registrada por Sony (hombre que camina) para escuchar música en el subte, en la calle o mientras se corre ya forman parte del pasado y de la historia de la música analógica.

Sony ha decidido dejar de fabricar estos dispositivos de música portátil para centrarse en los componentes digitales. Ha pulsado el 'stop' de estos casetes móviles que han marcado a millones de personas en todo el mundo en los últimos 30 años.

La compañía japonesa ha dejado de fabricar los míticos Walkman, una marca propia que dio nombre al reproductor de cinta magnética portátil que después hicieron suya usuarios y fabricantes. Porque antes de que los CDs, los archivos digitales, los Discman -también de Sony, por cierto- y los iPods fueran la norma, el Walkman era el compañero musical de viaje de todo hijo de vecino.

La compañía japonesa comenzó a fabricar este dispositivo en 1979 con el modelo de TPS-L2 y, sorprendentemente, aún lo seguía fabricando. Además, Sony hace tiempo que migró la marca a otros productos: los reproductores digitales y los móviles. El fabricante de Walkman hace tiempo que reutilizó la marca para su línea de reproductores digitales, que van desde los similares al iPod a de Apple a la curiosa serie W. Además, Walkman es el nombre de la aplicación de reproducción de música de los Sony Ericsson y hay modelos de móviles que directamente reciben este nombre, como el W200.

Fuente:

Clarín Internet

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